Por Alejandro Pantoja Caltenco
Espías a escondidas es la ópera prima de sus dos directores, que solo habían participado principalmente en los departamentos de animación y arte dentro del estudio. Teniendo en cuenta que ha sido horneada por la división de animación de Fox, Blue Sky Studios; responsables de la saga de la Era del Hielo (2002-2016), Río (2011) y Olé, el viaje de Ferdinand (2017), siendo sinceros, realmente no era algo que podía dejarnos tener las expectativas tan altas en su nueva cinta.
Los guionistas de la cinta, Brad Copelan y Lloyd Taylor, realmente no se rompieron mucho la cabeza dándole vueltas a la historia. Lance Sterling, como casi todos los espías en las películas, es del calibre de James Bond, al grado de incluso pasar por problemas similares como el ser perseguido al hacerlo pasar por el malo o enfrentarse a un villano con características físicas “particulares”. Sin embargo, la cosa no radica sólo en eso. Al querer huir, se alía con un novicio inventor pacifista, teniendo que llegar a un acuerdo en sus formas de trabajar para poder seguir adelante.
La trama realmente es poco novedosa pero realmente lo que saca completamente a flote toda la cinta es la gran dupla de actores detrás de las voces principales. Tom Holland es un joven actor que poco a poco se ha ido ganando nuestro cariño por su innegable carisma y que queda perfecto en este tipo de personajes un tanto torpes pero de buen corazón. Por el otro lado, Will Smith es alguien que ya tiene ese cariño en la bolsa desde tiempo atrás y siempre resulta tanto agradable como divertido de ver o simplemente escuchar.
El filme desde el simple hecho de que el personaje de Holland sea tan pacificador, deja en claro que todo lo que veremos será muy “blanco” (yo sé que usted, mi amable lector, sabe que me refiero a chistes inocentes pero en estos tiempos de cólera, nunca está de más dejarlo claro), siendo una propuesta completamente apta para toda la familia. Cosa que no refleja ningún obstáculo y resulta bastante divertida ya sea para los pequeños del hogar o aquellos que pagan ese hogar.
Tal vez no sea tan innovadora pero resulta en una agradable opción para ver en el cine, una en la que todos los miembros del conjunto familiar se les extraerán risas a lado del agente Sterling, Lance Sterling.