Seguimos en una sociedad que sigue apegada a ciertos tabúes, es hasta gracioso que en pleno 2019 temas como el sexo sean temas que en las familias mexicanas se evitan; una de las razones principales (a mi parecer) es por motivos religiosos. No todas las creencias son iguales, cambian en muchos aspectos, pero las que predominan en nuestro país son el catolicismo y el cristianismo. Con esto no quiere decir que en todos los hogares se manejen las mismas reglas que se dictan en la iglesia; algunos ocupan el libre albedrío, otros no. Sin embargo, el satanismo es un tema que se elude hoy en día, pero que no se sabe porqué.
Con una considerable carrera como directora independiente, Penny Lane nos ha traído documentales tales como “The Abortion Diaries” (2005) e inclusive “Our Nixon” (2013). Este año nos presenta “Hail Satan?”, que formó parte del Festival Internacional de cine de terror Macabro. En este documental, Lane nos mete en la vida del Templo Satanista, así como todos los prejuicios que corren alrededor de ellos. La mera verdad, yo al llegar a la sala, esperaba encontrarme con una trama seria, pues como católico de nacimiento, esta religión se toma como un tabú, es más, no se considera como tal una religión. Mi sorpresa fue grata al encontrarme que todo lo que pensé sobre ellos estaba mal.
La otra cara de la moneda.
La directora nos muestra que dicha Iglesia no es de lo peor, sino una comunidad que vive día a día con todas las críticas que reciben, en un país como Estados Unidos. El Templo Satanista ha hecho más en su país, que un solo cristiano o católico en su comunidad, y por ello tienen mi respeto. Otra de las cosas que más me impactó fue oír argumentos absurdos en la pantalla grande; porque decir que en las monedas y billetes norteamericanos tiene la frase “In God we trust” para evitar que el Templo se expanda raya en lo patético.
Con esto no quiere decir que repudie a Dios, pero se nos enseñan preceptos que nunca se aplican. Solo al salir a la calle, se ven personas religiosas que nunca harán una buena acción y hasta hablarán mal del prójimo, cuando se supone que se te enseña a no hacer ello. Se te enseña a respetar a tu familia, sin importar que tan arrogantes o irrespetuosos sean contigo, y la única justificación es el hecho de que compartes vínculos sanguíneos. La sociedad no está del todo podrida, porque existen personas que hacen más de lo que deberían; es interesante darte cuenta que hace décadas, por jugar Calabozos y dragones, o hasta por escuchar Heavy metal, se te tachaba de Satanista.
Hail Satan? expone que no todas las ramas del Satanismo se dedican a hacer cosas como el sacrificio, también hay personas que tienen preceptos sencillos, pero más importantes que 10 mandamientos que te atan a ir “Una hora a la semana escuchando que me voy a ir al infierno”, como dice Homero Simpson.
En conclusión
Hail Satan? es un documental que las viejas y nuevas generaciones deberían ver. Te muestran que no todo es como se te pinta en las iglesias católicas o cristianas. Es una lástima que en países como Estados Unidos solo prejuzguen y no se dediquen a conocer a esta religión, que nada de negativo tiene para los niños y jóvenes. Si un día ves que lo presentan de nuevo en cartelera, vela, te aseguro que no te arrepentirás.
Le doy 6 de mis 7 vidas, y recuerda: Hail Satan.
Por último, Astoreth, quién profesa de manera no activa el satanismo, les dejará su precepto favorito de la iglesia:
Involucrarse voluntaria e injustamente en las libertades de otro es renunciar a la propia.