El cine mexicano actual está en decadencia, y no es por falta de apoyo económico o ausencia de publicidad; sino por falta de ideas. En el caso del retrato de la sociedad, nos dan ejemplos que más que mostrarnos lo ocurrido, nos dan una ilusión falsa; como ejmplo tenemos Loco fin de semana (Kristoff Raczynski, 2019) . Las situaciones vistas en estas películas se centran en la clase alta cuyas viviendas se ubican en zonas lujosas que poco o nada son atractivas.
La ópera prima de Lila Avilés, en cambio, te muestra esa parte de nuestra sociedad al que no se le pone atención: la clase media trabajadora. La camarista se centra en el día a día de Evelia, así como sus objetivos en la vida, todo dentro de un lujoso hotel en la ciudad de México.
El otro reflejo
A diferencia de Chicuarotes, donde se ven las malas condiciones en las que viven muchas familias, aquí te enseñan que los trabajadores tienen una vida; vida que por falta de dinero, tienen que dejar a sus hijos a cuidado de alguien externo y “matarse” para darle lo mejor ellos. En ocasiones, uno como cliente trata y hasta insulta a los empleados porque creen que por el hecho de pagar por un servicio ya tienen todo el derecho; pero están equivocados.
Ellos son también personas que merecen respeto, que no por no tener tanto dinero son nada. Y esto sale también de mi experiencia previa en mis anteriores empleos.
Otro punto es que no todos los trabajadores son buenos en lo que hacen; siempre encontraras a quiénes quieren llegar lejos a través de influencias, y por desgracia lo logran, afectando a los que se esfuerzan por el mismo objetivo. Evelia representa a esa persona inocente y pura que poco a poco entiende como se maneja la estructura en su trabajo, y si bien al principio no le afecto, poco a poco sucedió. Además de que se nota que la directora toma como referente al neorrealismo italiano, esto al mostrar a la mujer como un personaje vulnerable.
La narrativa es sencilla y nos muestra otro protagonista igual de importante como Eve, que además es otra característica del neorrealismo: el hotel. Este nos enseña desde la habitación de la persona que siempre pide de más en utensilios de limpieza, hasta la madre extranjera con quién Evelia llega a sentir un afecto. Al tener el hotel como único escenario, no llega a ser tediosa, de hecho se nota mucho el cambio entre una escena y otra; como si éste hablará sin llegar a hacerlo.
El estrés
Otro tema muy importante que aborda La camarista es el estrés laboral, un problema no solo visto en México. No por nada en países como Japón se registra alta taza de suicidios por estrés en el trabajo. En la cinta, vemos a Eve como alguien que se la pasa todo el día con tal de lograr pagar a una persona que cuide de su hijo, y poco a poco se ven las consecuencias del ritmo de horarios que lleva; de como por cualquier motivo se tiene que quedar hasta tarde. Esta película es una crítica a las pésimas condiciones en que muchos mexicanos se encuentran en su empleo; de que siempre al cliente se le da prioridad, cuando primero es el trabajador; sin embargo esto tardará mucho en cambiar; o tal vez nunca suceda.
Conclusión
La camarista es el ejemplo de como hacer una excelente ópera prima con un tema que aún en el 2019 se sigue viviendo y un llamado a esas empresas que “explotan” a sus empleados. Por mi parte le doy 6 de mis 7 vidas, no se la pierdan en cines seleccionados.