Enferma de mí, ¿hasta que extremo puede llegar un narcisista?

¿Hasta qué extremo es capaz de llegar alguien que busca siempre ser el centro de atención? Después de su estreno en la 73 Muestra Internacional de cine de la Cineteca nacional en abril pasado, llega a los cines de forma comercial Enferma de mí (Sick of myself), donde Kristoffer Borgli nos responde dicha pregunta de una forma muy exagerada. 

Sinopsis

Signe y Thomas mantienen una relación de pareja competitiva poco saludable, que toma un peligroso giro cuando Signe se siente opacada por el reciente ascenso a la fama de su novio como artista contemporáneo. Como respuesta, Signe crea un plan malsano y perverso para reclamar la atención que cree merecer dentro de la élite cultural y social de Noruega.

¿Hasta qué extremo puede llegar un narcisista?

Una pareja está comiendo en un restaurante lujoso, el novio pide una botella de alcohol costosa y al escuchar el precio le pide al mesero que no lo diga, ya que es cumpleaños de su amada y no quiere que lo sepa. Minutos después y tras una celebración sencilla, el novio sale corriendo del restaurante con la botella sin pagar. 

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Enferma de mí comienza de forma atrevida al mostrar en pocos minutos la relación entre Signe y Thomas y como ambos tienen una tendencia a querer ser el centro de atención sin importar que tengan que arriesgar. Como lo dice la sinopsis, ambos se encuentran en una relación poco saludable y aunque no lo demuestran demasiado, Signe logra tomar la delantera en esta “competencia” a costa de su salud. 

Mientras avanza la trama, Borgli juega con el espectador al mezclar escenas sacadas de la imaginación de la protagonista con sucesos reales que cumplen con el objetivo de confundir y a su vez ilustrar que Signe cuenta con una percepción de la realidad alterada a tal grado de que crea escenarios casi imposibles. La cinta también nos muestra diálogos entre sus personajes que logran sacar desde una risa nerviosa, hasta una carcajada de pena ajena. 

La narrativa da demasiados saltos de tiempo, pero no se siente apresurada, es más, ésta ayuda a ver hasta qué punto puede llegar el narcisismo de la protagonista con tal de seguir siendo el centro de atención. En conclusión, Enferma de mí es una gran propuesta noruega que retrata los extremos a los que puede llegar una persona que es demasiado narcisista. No te la puedes perder a partir del 8 de junio en cines.

Calificación: 6 de 7 vidas. Disponible en Cinépolis y Cinemex.