A mediados de 1985, se presentó un caso muy curioso en el Estado de Georgia, ya que se descubrió un cadáver peludo de oso en lo profundo del bosque. Lo impactante, su muerte fue a causa de una sobredosis de cocaína, luego de que ésta fuera lanzada de una avioneta.
El suceso fue tan famoso a tal punto de tener su propio museo y ahora, gracias a la directora Elizabeth Banks, una película: Cocaine Bear (u Oso Intoxicado para Latinoamérica); misma que cuenta la historia de varios paquetes de cocaína perdida que encuentra una osa el cuál, al consumirla se vuelve agresiva. Por lo que, mientras que la osa está en búsqueda de su adicción, se encontrará a su paso con un grupo de policías, delincuentes, turistas y niños, creando terror a su paso.
Podría remarcarse la participación de Banks y sus productores (Phil Lord y Christopher Miller) en esta cinta de terror cómico, ya que convirtió un suceso de hecho real a un film con toques de Sam Raimi y John Carpenter. A tal punto que, puedes observar distintos planos y movimientos de cámara que enaltecen los momentos de tensión para concluir con la calma o con momentos cómicos.
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A pesar de tener un elenco acompañado de actores aclamados como Alden Ehrenreich, el difunto Ray Liotta y Margo Martindale, toda la historia y la acción de un oso realizado por CGI es ridícula a tal punto de no ir acorde al “basado en hechos reales” e incluso, tomando como referencia datos de Wikipedia. Y al observar esto, la película cumple con su cometido de ir a lo absurdo, lo cuál se aplaude.
Por otro lado, el guión está pensado para dar referencias a la cultura popular y tener esos juegos con el público que la hacen atractiva, como es el caso de las frases otorgadas al pequeño actor Christian Convery, quien se lleva la película con su elocuente actuación. Sin mencionar que, hacen un buen uso de canciones que van de la mano con las escenas; por lo que, el soundtrack magnifica los tonos burlescos de la cinta.
Aún así, aunque Oso Intoxicado se burla de ella misma e invita a burlarse de ella; a veces cae en los chistes constantes y no sabe cuando parar. Por lo que, no da un espacio al espectador para poder procesar todo lo que se dice, desperdiciando varios momentos graciosos que podían haberse rescatado en otras escenas o ser un buen remate de ellas.
En general, es una de las cintas que no debes esperar nada, solo pasar un buen rato; y que, gracias a su premisa única, explora los problemas de la adicción y sus consecuencias. Por lo que, si te gusta la sangre y el humor absurdo, podemos decir que la película del “Esco-bear”… efectivamente es cine. No lo digo yo, lo dice Rotten Tomatoes.
Esta película podrás encontrarla en tu cine favorito a partir de este jueves 16 de marzo.
Calificación 4 de 7 vidas gatunas. Miau. Disponible en Cinépolis y Cinemex.