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Por Atún y Bernardo Moreno
Inspirada en los cuentos clásicos nórdicos, llega a los cines del país El hombre del norte, la tercera cinta del director Robert Eggers, quien en 2019 nos trajo El faro. En esta historia, conoceremos al príncipe Amleth, quien emprende una misión de venganza tras la muerte de su padre.
Un relato tan viejo como la humanidad
Un joven e inexperto príncipe es obligado a esconderse y huir cuando el reinado de su padre cae con su muerte a manos de su tío. Decidido a vengar su muerte, el joven príncipe vuelve a sus tierras vuelto hombre para reclamar lo que le pertenece. ¿Les resulta familiar?
La trágica historia del príncipe danés, Hamlet, se ha representado en diferentes formatos, entre ellos el cine. Películas como “El Rey León (1994)” o “Los canallas duermen en paz (1960)” son algunos de los títulos que introdujo la obra a diferentes generaciones pero, ¿y sí les dijera que esta historia es mucho más antigua?
En el Siglo XIII, el autor danés Saxo Grammaticus nos presenta en dos partes a un príncipe, cuya historia dicen que deriva de un poema nórdico del siglo X, el predecesor directo de Hamlet y cuya leyenda inspiró “El hombre del norte”.
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La idealización del destino
A través de la pequeña filmografía de Eggers, se abarcan distintos temas relacionados con los mitos. En La Bruja, tenemos las leyendas sobre estos seres en el siglo 17, mientras que en El faro, se abarcan las supersticiones de los marinos y sobre todo, el misterio que se oculta en dicho lugar. El hombre del norte no es la excepción ya que durante su infancia y etapa adulta, el destino del príncipe desde su infancia se basa en cumplir su destino sin opción a decidir, lo cuál acepta en un inicio con la finalidad de idealizarse como héroe, y restaurar el honor de su familia. Todo cambia cuando logra afrontar a su madre, que es donde se da un quiebre de su realidad y las palabras que le dijo una bruja eslava (Björk) cobran sentido para él: decidir entre el amor de los tuyos o el odio de tus enemigos. Es ahí donde se da cuenta de que tiene la opción de comenzar de nuevo.
Dentro del reparto, quienes más logran brillar son Alexander Skarsgård y Anya Taylor-Joy, con quienes encontramos una gran química: dos personajes que tienen propósitos distintos, pero su destino se cruza. Pero tampoco se hace a un lado a la gran Nicole Kidman, quien nos entrega grandes momentos en pantalla, incluyendo un giro de trama inesperado que involucra a su personaje.
Si bien, El hombre del norte llega a ser predecible en la mayor parte de la historia, el hecho es que mientras avanza, ésta llega a sostenerse con una gran mezcla de banda sonora, elipsis y grandes escenarios, donde el director hace lo posible por ambientarnos en el siglo X en Islandia. Y lo logran de una forma impecable, ya que como dato interesante, Eggers escribió el guion con Sigurjón Birgir Sigurðsson, un artista de origen islandés quien ha hecho novelas, poemas y hasta obras de teatro.
En conclusión, El hombre del norte es una gran mezcla entre cine comercial y cine de arte, donde su punto fuerte no es innovar ni sorprender, sino adaptar de forma correcta una historia clásica que se vende como mito, mientras contrasta entre la realidad y la ficción. Sin embargo, aún se encuentra por debajo de El faro, pero llega a ser mejor contada que La Bruja.
Calificación: 5 de 7 vidas. No se la pierdan en Cinépolis o en Cinemex.
