Por Daniel Lee.
Me encuentro en la sala de cine, los trailers recién terminan, el logo de la productora millenium me anuncia que estamos por ver el evento principal, nos recibe una escena de combate con armas de fuego en alguna bodega random, en la escena vamos siguiendo a un señor gordito que parece que no cabe ni en el casco ni en el chaleco antibalas, la verdad se asoma entre cada centímetro de sus abultadas mejillas pero me niego a que sea la verdad, así que solo sigo viendo la película, con la esperanza de que no sea él… Las tomas pasan, la cámara estrepitosa no me deja seguir la acción claramente, pero este señor, a pesar de la aparente asfixia de su casco es bueno, al final, logra patear y matar a todos en el bunker y salir de él, y justo en el exterior ¡Bang! Lo reciben con una bala de gotcha, nuestro señor gordito y viejito perdió contra otro señor viejito, el siguiente momento lo registro en cámara lenta, nuestro protagonista se quita el casco, y como si estuviéramos desmoldando un flan, emerge una cara arrugada y cachetona que nos recuerda a Gerry de “Pd: te amo” al Fantasma de la Opera, a Beowulf, a Leonidas pero después de 300 tacos de suadero… Señores, con ustedes, Gerard Butler 2019.
A ver, no quiero mal entendidos con la audiencia así que continuemos. La película avanza a un ritmo lento, nuestro protagonista juega el papel de Mike Banning, agente del servicio secreto que en la primera y segunda entrega protegía al presidente de los United States (Aaron Eckheart) y actualmente cuida a un nuevo presidente Allan Trumbull (ya saben, sufragio efectivo), quien es representado ni más ni menos que por el mejor dios que hemos tenido hasta el día de hoy: Morgan Freeman. A Freeman no le cuesta trabajo sambutirnos todo el carácter de su personaje en solo 10 minutos, nos queda clarísimo qué tipo de presidente es y como maneja medio planeta, lo hace tan bien que uno podría pensar que ya a ha sido presidente en suficientes películas.
La película nos hace saber tan rápido como empieza que Banning ya las está dando, con una visita al médico el guionista juega la carta de “Estas viejo y debes retirarte” lo cual nos anuncia dos cosas, esta película será la última y nuestro personaje pasara más tiempo en desarrollo negativo que en acción; ya saben, esconder su enfermedad de su esposa y su hija, de sus amigos, del servicio secreto y hasta del mismísimo dios presidente. Toda la película va a ser un tren en picada intentando llevar al personaje a su cierre épico, que no está mal pero ¡Hay formas, tantita m@dr# por favor! Después de esto viene la carga emocional, alguien trata de matar el presidente, porque de eso trata esta película, en un giro de tuercas que ya había sido destrozado por el tráiler Banning es inculpado del atentado, es arrestado, escapa, es perseguido y reivindicado por la agente del FBI Helen Tompson (Jada Pinkett Smith) todo en un emparedado de escenas de acción algo lánguidas, que incluyen un torzón argumental para meternos, como cucharada de emulsión de Scott, al nunca antes mencionado papá de Mike Banning, el Sr. Clay Banning, interpretado magistralmente (no es broma) por Nick Nolte, quien en cierto punto se opaca por completo a Gerard Butler.
La película tiene un final pronunciado y en picada, no doy más detalles porque es caer en el spoiler, que no es nada impredecible pero vamos, aquí tenemos principios, el némesis de la película es el amigo de Banning, Wade Jennings, interpretado por Danny Houston y tampoco doy detalles de cómo se desarrolla esto porque es de lo poco que hay como trama. Lo importante es que la película termina como se debe: con ambos rivales en un duelo a muerte donde nuestro héroe siempre, SIEMPRE, sale bien librado.
Uno diría que el fuerte de la película es lo que todos esperamos: ¡LA ACCION! Pero no, tristemente y a diferencia de las dos entregas anteriores, esta película brilla por su acción de los 90’s.
Critica:
Vamos a empezar por lo menos valorable, las actuaciones, si bien en estas películas nunca esperamos unas actuaciones de Óscar sabemos que hay clases, y no vamos a comparar la actuación épica de Butler con las de estas películas, hagamoslo con sus precuelas; para empezar el papel de Banning nunca fue el más nutrido del mundo, pero para ser una tercera entrega creo que Butler pudo ser más intenso en el personaje. Así como Bruce Willis fue retacando la personalidad de Mclaine o Diesel la de Ridick; creo que Butler por el contrario tiro al personaje, pudo ser un personaje rudo, viejo pero con experiencia, pragmático y si, un poquitito más complejo. Se dejó caer en este personaje con problemas inventados para hacerlo profundo, un personaje que parecía ajeno a toda la historia de la saga, centrando la actuación a la obsesiva necesidad de salvar al presidente y pasando por alto que se supone estaba tan lesionado de la columna que estaba a punto de morir, no hay ni una sola referencia a la historia del personaje ni a la fuerza que este pudo haber adquirido en la saga, en pocas palabras, la actuación de Butler es sencillamente “agarra esta pistola y lucha por que no te disparen”; dista mucho de otros personajes similares y sobre todo, de la dureza que tenía en las películas anteriores, su interacción con otros personajes es rápida y superficial, hace unos cuantos minutos de dialogo y el resto de la película es gritonearle a los extras.
Por las actuaciones de reparto, pues… como siempre, a pesar de un gran elenco, estas son casi monosilábicas, no pasan de un “quédate quieto” “suelta el arma” “Bannnig es inocente” y esto va por casi todo el elenco, la actuación de Nolte es un poco más notable, con esas miradas que te demuestran que es un viejo arrepentido pero cabrón, se mete muy bien en su papel de lunático, no está sobrecargado ni sobreactuado. Simplemente la dosis perfecta para un papá conspiranoico de película de acción, dispara, corre, se arrepiente, todo con un trabajo de lenguaje físico bastante bueno; es una lástima que tenga tan poco tiempo en cámara, pues es también de las pocas partes del argumento que valían mas la pena ser exploradas. Por su parte Dios, es decir Freeman, tiene una actuación reciclada de presidente, la verdad es que con aquello de que no envejece, no sé si estoy viendo Deep impact o algo más, su papel es bueno, pero es el mismo de siempre: Un presidente duro pero justo, que parece comprender todo pero que es muy canijo, solo él sabe dentro de sus negros y divinos huesos que Banning es inocente.
Las demás actuaciones pecan de una contundencia simplista, “lo hacemos bien porque nos pagan” incluso el papel de Jada es poco comprometido, con la cantidad de atención que se lleva Butler es difícil hacer algo mejor pero…
En la acción. Hay pocas coreografías, es aquí cundo les digo que ya los años pesan, se nota que Butler ya no es el rey de Esparta, las escenas de peleas cuerpo a cuerpo son pocas y poco inteligentes, hay buena acción con gente madura como las de Denzel Washington en The equalizer, Jack Reacher, etc… en este caso se nota poca atención a esa parte, y si bien hay muchas balas, hay que recordar que muchas balas no es mucha acción, los tiroteos están mal planeados, con tomas al más puro estilo noventero, se enfocan mucho en ver gente cayendo entre cortes de cámara y francamente eso no deja seguir la acción. El director parece tener un fetiche con agujerar paredes, te hace patente como cada bala que es disparada va a dar a alguna pared, y no está mal, pero me hubiera gustado tomas lineales del tiroteo, ver un poco la tensión de toda la escena y no ver uno que otro gesto de horror en la cara de los baleados… vaya, al menos un poco de sangre porque para la cantidad de tiroteos y heridos, hay muy poca sangre.
El trabajo de fotografía pasó sin pena ni gloria, sabemos que en este género no se puede esperar muchísimo, estas van a ser las futuras películas del sábado de acción en el 5, no la voy a descalificar del todo, creo que hay un buen balance entre la steady cam y las tomas al hombro, bien pensadas para las escenas de los tiroteos y las persecuciones, (que solo hay una por cierto) en ocasiones se complica seguir la acción con la cámara en movimiento. Si ves cine de acción, las escenas siempre son bien iluminadas y los escenarios te dan la amplitud correcta para apreciar el buen trabajo de la producción en el set y el departamento de arte, el cual es realista en muy muy buena medida, desde las casas y oficinas hasta los sets al aire libre, la paleta de colores es vívida y algo desaturada, extraño en estas películas suelen exagerar el fuego con saturación, se agradece esto para variar.
El sonido no es espectacular, francamente no hay mucho que decir, disparos sordos, gritos prefabricados de multitudes que ya reconozco a fuerza de escucharlos desde hace 15 años, no hay un trabajo de soundtrack notable, sé que tiene uno, pero la verdad es que es muy genérico, digamos que cumple con su trabajo.
La edición final es de cajón, no me voy a ensañar, pero sí pienso que hay demasiados cortes en las escenas de acción, evidentemente esto tiene la finalidad de crear dinamismo, pues Butler ya no es un atleta, pero si llega un punto en que parece un video del Werever, tal vez John wick ya nos maleducó a escenas de acción tan dinámicas.
Conclusión:
No me gusto, siento que este tipo de películas compartirán un día el espacio en el 5 con las películas de Charles Bronson o Chuck Norris. Está muy lejos de ser memorable, Gerard no ha podido consolidarse como un héroe de acción, la verdad es esa, y todos sabemos, no puedes hacer a un héroe de acción viejo si no estás consolidado; con el personaje y con tu propio personaje de acción. Así lo ha hecho Bruce Willis, Stallone, Snipes, Rouke y muchos otros, a Gerard lamentablemente no lo ubicamos mucho fuera de 300 y no le da las credenciales para poder decir que es viejo y cabrón, no nos engancha del todo. A Gerard le quedan varios años de acción, si va a seguir perdiendo complexión a este ritmo, sería bueno que redefiniera su papel de acción con algo papel más fuerte, más nutrido, porque definitivamente con Banning, el ángel cayo y como ya dije, en este negocio, una libra de cachete…
No es cachete!!!
Calificación: 4.5 de 7 vidas.