Birds of prey: ¿una cinta feminista?

Por Astoreth.

Este viernes llegó a la pantalla grande la nueva aventura de Harley Quinn. La primera impresión que me deja esta película es que es extremadamente estúpida y por nada del mundo debe tomar como canon o como continuación de Batman vs Superman o Suicide Squad, pero aún así es una cinta con mucho potencial

Sinopsis.

La historia es sobre el robo, un robo muy fortuito por cierto, de un diamante que pertenece a la familia Bertinelli. No hay más; es algo sencillo y dentro de la trama nos vamos enterando un poco del pasado de los personajes, el cual también lo mantienen por encimita.

Entonces… ¿Por qué digo que tiene potencial?

Pues verán; la cinta se sale un poco de lo que nos tienen acostumbrados tanto DC como Marvel. Una cosa es tener una ruptura amorosa y seguir yendo al call center o a la oficina de siempre, es hasta cierto punto “fácil”; pero cuando vives una vida de cómic, tienes que lidiar con el rompimiento y con el hecho de ser villana, podrías adoptar un perro, enmendar errores del pasado, concentrarte en independizarte, incluso convertirte en tutora… pero todo esto llevado al extremo y con la poca salud mental de Harley.

Esta película la veo como una parodia al género de los supers, imita pero no copia a Deadpool, creando una divertida historia que en la primera mitad no es lineal, con coreografías absurdas, movimientos de cámara lentos y “heridas graves” que provocan risa.

¿Feminismo?

No sé si llamar feminista esta cinta, porque claramente no se enfocaron en eso; hicieron un guión y punto. No vas a ver el clásico discursito aburrido y las justificaciones de los actores y/o directores, intentando darle un trasfondo a sus personajes porque en realidad sólo son un grupo de mujeres sin aspiración a ser heroínas pero que están hartas de ser subordinadas, de estar atadas a su pasado o a sus exparejas; o de que no se les tome en cuenta en el trabajo y deciden desquitarse de la forma más comiquera posible: a golpes.

Casandra Cain

Una disculpa, pero mi lado geek no lo podía dejar pasar.

La película funciona, tiene personajes fabulosos que mantienen un poco el carácter de sus contrapartes dibujadas, excepto: Casandra Cain.

Para fines prácticos, es entendible que se necesitaba de una niña que cumpliera el papel de torpe, indefensa y rebelde…. pero ¿Por qué, en el nombre de Batman, tenían que elegir a Casandra Cain? Pasó de ser uno de los miembros de la Batfamily más letales, a ser una gordita chistosa que no se destapa ni con juguito de ciruela.

Así que en mi enojo ñoño, les dejo una lista de los posibles candidatos que se pudieron utilizar en el papel y que sí considero torpes (aquí es donde posiblemente me va a llover arena).

1. Stephanie Brown. Fin de la lista.

Antes de que me tiren arena, permítanme explicar: Stephanie hubiera encajado mejor con el papel creado en esta cinta. Sí, fue la única en portar el manto de Robin y de Batgirl, pero también era la única que tenía una personalidad desesperante, entre querer compararse con los demás miembros de la Batfamily, luego con autocompadecerse por tener un padre villano y finalmente, el punto que más pudo encajar en la historia y que posiblemente sea un spoiler sin contexto: Terminó y volvió con Tim Drake la misma cantidad de veces que “la Britany” y “el Kevin” de tu colonia popular de preferencia; ella era la indicada para ser la gordita chistosa y con problemas estomacales.

Conclusión.

No esperen la gran maravilla, es divertida e innovadora pero nada pretenciosa. Ellos mismos se burlan de algunos “errores” de producción y es bastante divertida. Mi calificación es 5 de 7 vidas gatunas.